viernes, 3 de abril de 2009

La primavera

Qué bonita es la primavera! La gente estornuda, la nariz se pone roja, los días son más largos y a mí me construyen un panal en mi persiana...

Mira que ya lo dije... Unas abejitas pequeñitas y peluditas iban de un lado para otro transportando barro con sus patitas y metiéndose en los agujeros de la persiana del balcón. ¡Qué monas! -dije yo- creo que se están haciendo una casita en nuestro balcón.

Y ahora la pregunta es: ¿qué hago? Quiero decir, sé que soy idiota (ya lo proclamé el otro día a los cuatro vientos) porque podía haberles evitado todo el trabajo, pero no lo hice y ahora me sabe mal... Y mi parte contratante dijo que no podíamos tener un panal en el balcón. Pero lo convencí para dejarlo un tiempo porque tengo la esperanza de poder convivir con un montón de abejorros de forma pacífica.

¿Cómo acabará esto? Porque como la persiana sufra un golpe inesperado y salgan todas las abejas a la vez a mí me da un soponcio de los buenos. Además, he leído que cuando una abeja te pica segrega una feromona que hace que el resto de abejas vayan a por tí. Sólo de pensarlo ya me entran los calores...

Pero es que de verdad, son tan monas cuando se ponen en mi jazmín...


1 comentario:

Jesús dijo...

Yo tuve una vez avispas en una ventana... No pasó nada pero lo cierto es que a mí me aterrorizan las avispas y las abejas!! Será muy bonito tenerlas en tu casa pero yo prefiero verlas en la tele!

bsos