Pero no dormirse de aburrimiento... Me refiero a dormir porque se llega a un estado de relajación total donde la música te envuelve.
Últimamente por las noches me pongo instrumentos de viento como el shakuhachi (japonés) o el duduk (armenio).
A continuación pongo una pieza anónima titulada "Kayikçi" e interpretada por Suren Asaduryan. A mí me recuerda a una nana. Sólo me falta escuchar las olitas del mar de fondo...