miércoles, 25 de febrero de 2009

Domo Arigato

Hace algún tiempo descubrí un grupo de música, The Polysics. Creo que es un grupo japonés y la verdad es que no puedo escuchar el disco entero seguido porque acabo con la cabeza hecha un bombo. Me hace mucha gracia el vídeo Domo Arigato, Mr. Roboto. Pero el que hoy voy a poner me alucina aún más. Luego no me extraña que algunos niños tuvieran ataques epilépticos al ver algunas de sus series animadas. A veces es todo tan histriónico...


sábado, 14 de febrero de 2009

Soy funambulista. 2ª parte (y final)

Se acabó esto de deshojar la margarita y seguir con el ramo entero. Se me vienen encima bastantes obstáculos que estoy dispuesta a atravesar, aunque lo tenga que hacer a cabezazos. Por fin voy a atreverme a cruzar la cuerda floja. Sin mirar abajo para que no me entre el vértigo.

Básicamente ya todos sabéis por donde voy. Hace algún tiempo le daba las mismas vueltas a lo mismo, con la diferencia que ahora he tomado la decisión y voy a llevarla a cabo. Llevo años en una carrera que no he querido hacer desde el principio y en vez de cambiarme antes lo único que he hecho ha sido alargar el sufrimiento hasta que todo ha explotado. Llevo mucho tiempo lamentándome por ello, pero desgraciadamente no tengo una máquina que me retroceda diez años atrás. Así que el primer paso es superarlo de una vez por todas, el pasado que se quede atrás que ahora me toca remendar los errores... y supongo que tendré que dar un montón de explicaciones... así que antes de decir nada a nadie tengo que convencerme fuertemente para no empezar a dudar. Porque aunque sé que mi madre me dijo que ella es feliz si yo estoy feliz también piensa que con 25 años que tengo ya va siendo hora de que empiece a centrarme. Sé que ella piensa que soy mayor para hacer otra cosa. Yo también lo creo, pero soy optimista y calculo que por lo menos llegaré a vieja pelleja así que el segundo paso es dejar de preocuparme por la edad.

El caso es que soy muy soñadora y muy idealista por eso los golpes que me llevo siempre me sientan tan mal. Me he parado a pensar y me he preguntado "qué me apasiona" y después me he preguntado "podría vivir de ello"... No lo sé. No sé si podré vivir de lo que me gusta pero como ya he dicho antes voy a llegar a vieja y me gustaría mirar atrás y sentirme orgullosa de mí misma para aconsejar bien a mis nietos...

Me estoy enrollando. Quiero hacer Comunicación Audiovisual. Ahora ya no estoy en la radio y no he llevado muy bien eso de dejar de escribirme los guiones. Me he dado cuenta de que no lo hago por hobby. Lo hago porque me gusta, porque me siento segura haciéndolo. Y creo que a pesar de los millones de defectos que tengo también poseo ciertas cualidades. Y aunque sé que mi cerebro sería como un diamante en bruto para el gremio psiquiátrico también me gusta la cabeza que tengo. Aunque oiga voces y mantenga conversaciones conmigo misma y luego me mee de la risa y me ponga a escribir un montón de historias que no me lleven a ningún sitio...

Por desgracia para mí, escribir guiones no te hace guionista. Ya me gustaría decir que lo soy pero si no tienes un trozo de papel que diga "a esta tía le han dado por culo cinco años para conseguir este papel" no eres nadie. El problema de Comunicación Audiovisual es que no hay en Alicante. Bueno, sí. Tendría que irme a La Ciudad de la Luz, un complejo cinematográfico que hicieron hace un par de años. He llamado al Centro de Estudios para preguntar cuanto vale y evidentemente no me lo puedo pagar. Vale tanto dinero que me puse a hacer cálculos y me sale más barato irme a Valencia. Alquilarme un piso en Valencia, vivir allí y estudiar allí me sale casi por el mismo precio que estudiar el primer curso en Ciudad de la Luz...

Conclusión: pues vete a Valencia, me dice mi parte contratante. ¿Así de fácil? Pues claro. ¿Y qué pasa con nosotros? Que sólo estamos a dos horas. Por eso es mi parte contratante. Es él el que pone el equilibrio y menos mal que casi nunca me hace caso... Pero llamé a Valencia y no me puedo cambiar de carrera. Conclusión segunda: estudio el primer año en Ciudad de la Luz y luego me cambio a Valencia...

Así que tanto rollo he metido para contar esto. El problema principal es que no tengo trabajo y como siempre hago las cosas del revés me pongo a buscarlo justo en el momento en que abundan los despidos en vez de las contrataciones. Y aunque me dieran un trabajo mañana no me daría tiempo a recaudar todo el dinero que necesito. Pero como ya he tomado la decisión me tengo que poner en marcha y más que "intentarlo" tengo que "hacerlo".

No más llantos. No más vueltas atrás. No más margaritas...


viernes, 13 de febrero de 2009

Soy funambulista. 1ª parte.

Soy indecisa. No es ningún secreto. Pero sí que me resulta un problema. Desde lo más pequeño hasta lo más grande. Convierto un grano de arena en una montaña imposible de escalar. Llevo 20 años tomando el mismo sabor de helado. Total, si la stracciatella me gusta para qué probar otro... sí, me encanta ese sabor. Pero nunca escojo otro porque hay tantos en el mostrador que puedo tirarme una hora para decidirme por uno en concreto... Una vez en un acto de chulería elegí una tarrina de fresa. Y en vez de disfrutar de mi helado me pasé repitiendo en cada bocado "tendría que haberme cogido el de stracciatella". Ese es mi segundo gran problema: me arrepiento enseguida de mi decisión por muy tonta que sea.

Soy indecisa hasta el punto de convertirme en una caricatura de mí misma. Y es una lucha constante lo que llevo en mi interior. Basta con que decida algo, aunque sea una trivialidad, que si me preguntan "¿estás segura?" ya la hemos liado. A veces he tomado decisiones importantes sabiendo que iba a cambiar el camino de mi vida. Pero estas decisiones no las he tomado por mí, sino para ayudar a otras personas, así que al fin y al cabo no cuentan. Y llevo ya bastantes años lamentándome con el "tendría que..." Mi vida se ha convertido en un condicional siempre con el "y si" en el pensamiento.

Ahora he decidido que tengo que cambiar esto. Y llevo un par de semanas dándole vueltas a todo. Me siento como una niña pequeña que está aprendiendo a caminar y cada vez que se cae llora sin moverse hasta que vienen sus padres a levantarla otra vez. Ya no quiero ser así. Me he cansado de mí misma, soy una pesada y una llorica. Me miro al espejo y pienso que me tengo que cortar el flequillo porque ya casi no veo (esto es una nota mental mía), en realidad no me gusta lo que veo así que me hablo para animarme (esto tampoco debería contarlo, luego todo el mundo me conoce demasiado bien). El caso es que tampoco puedo cambiar un problema tan grande de la noche a la mañana así que me está costando lo mío. Necesito mi período de adaptación, sobretodo para coger aire en los pulmones y tirarme de cabeza a la piscina. La semana pasada tomé una decisión bastante importante y en dos días he hecho como cuarenta planes alternativos y he cambiado de idea unas mil veces. Pero cuando uno toma una decisión hay que desechar automáticamente las otras posibilidades, sino nunca hay manera de centrarse. Sin planes b. Sin arrepentimiento. Sólo un objetivo.

Tengo la sensación de estar mucho tiempo en la cuerda floja. Porque tengo vértigo, porque tengo miedo, porque no me atrevo, porque no sé si lo que me espera al otro lado realmente es lo que yo quiero... No es fácil tomar una decisión. Nunca sabes si será la acertada. Siempre está la duda y al final te acabas guiando por la intuición. Siempre está el temor de cometer errores, de no saber como afrontarlos. Aunque esos errores se arrastran mucho mejor cuando son sólo tuyos. Así que ya no me da miedo equivocarme pero sí me da pánico el no haberlo intentado. Y ahora pregúntame ¿estás segura?. Que mi respuesta es "sí, lo estoy"

viernes, 6 de febrero de 2009

Dando la chapa

Yo no tengo ningún talento especial, quizás por eso siempre me ha hecho feliz encontrar a gente que sí lo tiene. Y algo que me asombra mucho es conocer a gente que sabe dibujar. Ahí está mi primo Jesús por ejemplo, que era un prodigio con el pincel desde pequeño y lo sigue siendo. O mi prima Inma, que siempre hacía dibujos que salían directamente de su imaginación, ahora los pinta sobre los cuerpos. Y me encantan. Siempre cogía sus libretas y miraba una y otra vez sus dibujos. Por eso me puse tan contenta cuando Jesús (UnCactus), desde Asturias, dijo que me mandaría unas chapas personalizadas. Chapas personalizadas! Y casi abrazo al cartero cuando me trajo el paquetito. Y casi me da un soponcio cuando vi tantas chapitas. Algunas no las ha hecho él y me hizo ilusión de que acertara de pleno: Chaplin, Nosferatu, Metrópolis, Zissou... soy muy fácil de conocer ya lo sé. Pero las chapas que más me gustaron fueron las de sus propios dibujos. Me mandó una serie de superhéroes cotidianos, cada uno con su historia. Así que no es que tenga en mi posesión una simple chapa. Tengo toda una creación de manos de un artista. Y ahora él dirá que no, que no es un artista pero no hacedle caso. Porque una persona que crea un dibujo con toda una historia detrás no tiene otro nombre que no sea artista. Y yo lo valoro muchísimo. Y encima me encariño con las cosas enseguida. Por ejemplo, tengo un montón de figuritas de Tim Burton y aunque todas tienen nombre yo me refiero a ellas como "mis nenes". Así que ahora he adoptado a los personajes de Jesús: a Francisquito, al hombre que no podía dormir, al hombre inempujable, a gilipollo entre otros más.

Pero mi favorita es "La niña con las cejas de remolino". No me digas que no la adoptarías!!
Gracias UnCactus

jueves, 5 de febrero de 2009

Disfraces

El 28 de Febrero tengo una boda. Nunca salgo en Carnaval, me agobia la gente. Te puedes desmelenar y como llevamos antifaces somos más sociables. Bueno eso y que la gente bebe y vuelve a beber como los peces en el río. Yo cada vez que salgo me desmeleno, o por lo menos hago el payaso de lo lindo, siempre y cuando salga con mis primas, que son las únicas que no se avergüenzan de mí. El caso es que nunca salgo en Carnavales, siempre me voy al cine esa noche. Pero este año se me había ocurrido arrancarme un ojo (de mentira claro) y pegarme un montón de pájaros (también de mentira) en el abrigo. Y así podría hacerle mi pequeño homenaje a Hitchcok. Pero me dijeron que Carnavales era el día 28. Así que a mi madre le dije que iría a la boda con vestido pero con un montón de pájaros pegados en el abrigo. Y mi madre tiene muy buen humor, pero a veces me toma en serio y me gritó con la voz de pito que sólo saben poner las madres: "pero como vas a ir con pájaros en el abrigo, estás tonta o quée"

Al final los Carnavales no son el día 28. Pero yo ya paso de pájaros, me iré a ver Gran Torino de Clint Eastwood y punto. Eso sí, para el día 28 sí que voy a estar bonica. Dediqué todo un sábado regloso y lluvioso a la búsqueda del vestido. Todo el día metida en El Corte Inglés, todo el día!!! Y al final el vestido me lo compré en otro lado. Y hoy he ido a la búsqueda de los zapatos. Y sólo he tardado cinco minutos porque estoy ya tan pasada de rosca que le he dicho a mi madre "llévame al sitio donde te gustaron los zapatos que yo paso". Y de zapatos no entiendo pero me he comprado los que le gustaban a mi madre, que ella sí que entiende. Y yo los veo un poco como de monja puritana pero ella dice que qué va, si son muy elegantes...

Así que nada, el día 28 iré de tía cañón por unas horas, con pies de institutriz de Sonrisas y Lágrimas y estoy pensando que sí, que igual me pego algunos pájaros en el abrigo aunque ya no sea carnaval...

miércoles, 4 de febrero de 2009

Recuerdos y reflexiones

Recuerdo cuando mi abuelo paterno murió. Me pilló en plena selectividad. Todo un año preparándome para hacer los exámenes que se supone iban a determinar mi futuro. Todo un año centrada en eso y luego todo se borró de un plumazo. Es curioso como a veces las cosas que creemos más importantes dejan de serlo en cuestión de segundos. Ya no me importaba tanto la selectividad, sólo quería ir al hospital a ver a mi abuelo. Durante los exámenes mis compañeros estaban histéricos. Entre examen y examen sacaban los apuntes y se ponían a repasar como locos. Yo tenía una calma pasmosa. Me paseaba por el campus y me tumbaba en el césped, debajo de un árbol, a mirar el cielo. Mis amigos pensaban que me había tomado alguna pastilla o algo parecido. A veces soy práctica. En una hora no me da tiempo a estudiar nada nuevo así que prefiero relajar la mente. Siempre me funciona. Pero en el examen de Historia me derrumbé. Me preguntaron la independencia de las trece colonias o algo así. Por un momento aluciné, no conseguía recordar nada, no sabía como empezar. Y cuando iba a levantarme para entregar el examen en blanco me acordé de la película que hizo Mel Gibson sobre el mismo tema, la peli era la de El patriota. Por no dejarlo en blanco hice una sinopsis de la película. Saqué un 2, eso fue lo más increíble...

Cuando mi abuelo murió nunca antes había ido a un funeral. Me quedé a pasar la noche en el tanatorio con mis tíos y lo recuerdo como algo bonito, nos lo pasamos bien. Sé que es la risa nerviosa de antes de los funerales, pero aún así tengo un buen recuerdo de aquella noche. El caso es que el otro día iba de camino a casa y me estaba haciendo pis. Y cuanto más cerca estaba la puerta de casa, más ganas me entraban a mí. Y me acordé de mi abuelo. Porque cuando era pequeña hacía una cosa que odiaba. Cada vez que yo estaba a punto de mearme encima y a lo mejor íbamos en el ascensor hacía un sonido como de agua. Se pasaba los 20 segundos en el ascensor haciendo "psssssssssssssss". Y al final se me escapaba una gota. Odiaba que hiciera eso, no me hacía nada de gracia. Pero el otro día me acordé y me hizo reír. Cuando alguien muere se le suele magnificar. Y yo ahora recuerdo a mi abuelo por hacer cosas que no me gustaba que hiciera. Supongo que era su forma de demostrarme que era mi abuelo. Y es curioso porque uno nunca sabe cómo le recordarán. Y también es curioso que a veces se echan en falta las cosas de las que pensabas que podías prescindir. Y eso que me hacía mi abuelo lo hago yo a los demás. Cada uno recuerda como puede.

martes, 3 de febrero de 2009

I believe in miracles

Me encantan los Ramones. Me ponen de buen humor. Hoy ya no llueve y se ha ido la ansiedad de comerme un elefante. Me siguen doliendo las muelas. Además, uno de mis gestos característicos cuando estoy preocupada es apretar la mandíbula. Lo hago sin darme cuenta pero eso hace que las muelas duelan más. Últimamente estoy más preocupada de lo habitual. Pajas mentales suelen llamarlo... Por lo visto yo soy la reina de la masturbación mental. Y por lo general salpico al que esté más cerca, es decir, a mi parte contratante. Pero casualmente siempre tiene las cosas claras. Es duro tener una mente tan desordenada como la mía y además, cuando tomo una decisión sigo dudando. Lo que hace que entre en un bucle infinito. Hasta que algo o alguien me vuelve a sacar de ahí. Me encantan los Ramones. Cuando estoy desanimada siempre me pongo a bailar "Beat on the brat". Pero esta vez ha sido la canción "I believe in miracles" cantada por Eddie Vedder. Al escuchar la parte donde dice: "Cierro mis ojos y pienso como pudo ser. El futuro está aquí hoy. No es tan tarde. No es tan tarde todavía"
Ya está. Lo he visto claro y he descolgado el teléfono. Mierda! No ha contestado nadie. Pero ya he dado un paso y cuesta menos...

lunes, 2 de febrero de 2009

Daño

Los meses de Febrero y Septiembre son mortales para mí. Y hoy tengo un mal día. Primero porque está lloviendo. Me gusta la lluvia si no tengo que salir de casa porque tengo alergia a la humedad y porque tengo una suela del zapato rota, así que siempre acabo por mojarme los calcetines. Y hoy precisamente tengo que salir. Segundo porque tengo la regla y una ansiedad inhumana por comer guarrerías pero dentro de 27 días tengo una boda y me he comprado un vestido que jamás pensé que podría llevar. Y aunque ahora mismo quede como una frívola superficial me da lo mismo, pero voy tan guapa que no me pienso ni peinar para no hacerle sombra a la novia... Tercero, no puedo más con el dolor de muelas. Estoy pasando por un calvario. Llevo más de un año con las dichosas muelas del juicio. Me ha salido un bulto en la garganta, me duele. Tomo pastillas, pero me duele. Me están creciendo todas a la vez y me duele. Me duele, me duele, me duele. Estoy de mal humor porque me duele. El sábado por la noche lloré porque me duele. Hoy también he llorado, bueno pero ha sido por otra cosa. El caso es que no puedo más. El dentista me hizo una radiografía de la boca y me dijo que tenía espacio suficiente, que no hacía falta operar. Y ahora se me ha torcido un diente, no se nota mucho pero yo sí que me lo veo.

Todo esto viene porque hoy no paro de escuchar una canción, Hurt. Es de Nine Inch Nails pero yo me pongo la versión que hizo Johnny Cash y aunque no tiene nada que ver la letra conmigo esta canción me pone más sensible de lo que estoy. Porque hoy llueve y me duele.